Reseña de The Son And The Sea, de Stroma Cairns

A la sección New Directors hay que ir, más que a buscar una película redonda, pensado en encontrar un nombre al que seguir la pista. Y el de Stroma Cairns encaja perfectamente en esa idea. The Son and the Sea, su ópera prima, arranca con un joven perdido y violento, Jonah, que se refugia en el alcohol y en la pelea como si no hubiera otro modo de vivir en Londres. Cuando ya no puede más decide escapar unos días junto a su amigo Lee, en plena crisi por una ruptura sentimental, hacia el noreste de Escocia, a casa de una tía anciana que ahora vive en una residencia. La huida, más que un descanso, se convierte en un viaje interior, un descubrimiento de sí mismo y de la amistad.

Hay algo familiar en todo esto, y no solo en el sentido argumental. Stroma Cairns escribe y produce junto a su madre, Imogen West, convierte en protagonista a su hermano Jonah y se rodea de actores con problemas de audición —como los que ella misma tiene— y debutantes para construir un relato en el que lo personal late en cada plano. Lo confirma la aparición de Charlie, un joven sordo con el que los protagonistas aprenden otra forma de comunicarse, lo que abre un espacio para hablar de vulnerabilidad, ternura y empatía en un contexto que tantas veces ha retratado lo contrario: la masculinidad entendida como dureza o silencio.

A la directora bebe de ese cine británico que convierte el paisaje en espejo interior. Los acantilados, el mar embravecido y las casas vacías son tan parte del relato como las propias conversaciones de los personajes. Y ahí se nota que Cairns tiene talento. Hay pulso y fuerza a la hora de reflejar la acción, pero también lirismo y contención para los momentos íntimos. También destaca el uso del sonido y de la música, algo que no deja de resultar llamativo teniendo en cuenta los problemas de audición de la directora.

Claro que no todo funciona. El guion quiere abarcar más de lo que debería: hay subtramas que no llevan a ningún sitio y un desarrollo con los dos hermanos con problamas de audción del pueblo que resulta confuso y poco integrado. Se nota cierta dispersión en la escritura, un ir y venir que amenaza con diluir el conjunto. Pero cuando parece que se va a perder definitivamene, el cierre le devuelve sentido y potencia.

Las interpretaciones ayudan mucho: Jonah West y Stanley Brock debutan con naturalidad, transmitiendo la complicidad de una amistad que se siente real, sin imposturas. Y eso sostiene incluso los tramos más irregulares.

The Son and the Sea

Media Flipesci:
6
Título original:
Director:
Stroma Cairns
Actores:
Jonah West, Stanley Brock, Connor Tompkins, Grant Lindsay, Lewis Tompkins