The Fast and the Furious es al tuning lo que Le llaman Bodhi es al surf. Después, la franquicia ha ido por otros derroteros que le acercan más a James Bond, pero en su primera entrega era así. Para ello aplica recursos dramáticos idénticos y un parecido asombroso -por no decir sospechoso- en el argumento. Vamos a repasarlo con detalle pero primero os dejo esta infografía para tener una imagen general del parecido entre ambas películas. Por supuesto, a partir de aquí, spoilers a tutiplén de ambas películas.
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Escena a escena
Vamos a entrar más en detalle. Para abreviar, permitidme referirme a las películas como Fast y Bodhi. En primer lugar quiero señalar una diferencia. En Fast deciden desvelar que Brian (Paul Walker) es un agente a la media hora de película, mientras que en Bodhi se sabe desde el principio. Esto hace que mientras en Bodhi hay varias escenas de investigación para llegar a la conclusión de que los atracadores son surfistas, en la otra no. Es la principal diferencia del primer acto.
Primer atraco
Es la primera escena en Fast. En Bodhi hay un par de escenas introductorias antes (imágenes de los protagonistas durante los créditos y el primer día de trabajo de Utah (Keanu Reeves). Un atraco limpio y rápido, sin víctimas. En ambos casos se nos oculta la identidad de los criminales para jugar con la incertidumbre. En Fast roban camiones, en Bodhi roban bancos. El robo de camiones está relacionado directamente con la habilidad de la banda. En Bodhi no, pero aprovechan para señalar su condición antisistema usando caretas de los expresidentes (con referencias al robo sistemático de estos e incluso Reagan hace referencia a la desregulación). También señalan que los bancos están asegurados.
Práctica
Utah y Brian empiezan a practicar. Utah casi se ahoga haciendo surf, así conocerá a Tyler (Lori Petty), Brian no consigue hacer el tiempo necesario con su coche. Son advenedizos (Utah mucho más) que deben infiltrarse en una comunidad de expertos, bastante cerrada.
Contacto
Utah localiza dónde trabaja Tyler y se presenta allí. Es camarera. En Fast, Mia (Jordana Brewster) también es camarera. No sabemos bien exactamente qué ha llevado a Brian a elegir ese contacto porque, como decía, aún no sabemos que es un agente. En ambos casos es camarera y habrá una historia de amor. En ambos casos es el nexo de unión con el líder del grupo: Mia es la hermana de Toretto (Vin Diesel) y Tyler es la “ex” de Bodhi (Patrick Swayze). Pongo lo de la “ex” entre comillas porque digamos que no es tan clara su situación sentimental. Ella le llevará al líder.
Encuentro
Los protagonistas se conocen por fin. En ambos casos, el grupo se mostrará hostil con el infiltrado (en Fast, mucho más). En ambos casos, el líder mediará para proteger al nuevo.
A partir de aquí hay una serie de situaciones en las que el infiltrado va ganando el respeto del líder. Enfrentándose a él (en carreras de coches y en un partido de fútbol americano) y sobre todo demostrando valor y respeto. En Bodhi hay una pelea con unos surfistas nazis en la que Bodhi le salva el culo -en Fast sirve la hostilidad del propio grupo, pues llegan a las manos. En Fast es Brian el que salva a Bodhi, ayudándole a escapar de la policía, cosa que no ha hecho su equipo, como después Toretto destacará. Por el camino, Bodhi y Toretto se enfrentarán a la banda de Johnny Tran, como en el caso de los nazis, será una experiencia de enemigo común que les unirá más. Estas situaciones en ambas películas avanzan rápido y desembocan en que el líder invita al infiltrado a una fiesta.
Fiesta
Es una de las claves emocionales de las dos películas. El intruso es aceptado oficialmente cuando es invitado a la fiesta, un paso imprescindible para ser considerado parte del grupo. En ambos casos supone un acercamiento a la chica (en el caso de Bodhi consumando, en el otro habrá que esperar, que son más conservadores). «Lo mío es tuyo» le llega a decir Bodhi a Utah, en una referencia ambigua que puede señalar a la chica. Toretto le quita la cerveza a su número 2 para dársela a Brian, marcando estatus. En Bodhi la fiesta es más alocada.
Redada equivocada
El protagonista, en las dos películas, no está dispuesto a creer que el líder a quien cada vez respeta y aprecia más, sea un criminal. En su lugar, sospecha de otra banda, concretamente de aquella con la que ya han tenido un conflicto anteriormente. Esto lleva en las dos películas a una redada -mucho más emocionante en Bodhi, más tangencial en Fast. En los dos casos acaba con éxito pero se descubre inmediatamente que no son los criminales que buscan. El héroe se llevará bronca del jefe.
Entre la escena de la fiesta y la redada, en Fast, está toda la parte policial porque se descubre entonces. En todo caso, en ambas películas la redada va justo al día siguiente de que el protagonista por fin pase la noche con la chica, que como he dicho, en Fast lleva más tiempo.
Atraco final
Una de las últimas escenas de las dos películas es el atraco, tal y como lo han practicado hasta ahora pero con el héroe participando con el grupo. En el caso de Bodhi porque le obligan, en Fast porque Brian intenta evitar que les maten. Parte de la banda termina gravemente herida. Aquí el héroe se adentra en el lado más oscuro. De momento, el líder escapa -en el caso de Bodhi, con una persecución aérea espectacular.
Epílogo
En Bodhi sucede un tiempo después, cuando Utah ha rastreado a Bodhi hasta una playa australiana. En Fast es poco después del atraco, debido a una escaramuza. La conclusión en ambos casos es que el héroe atrapa al líder. Ya lo tiene. La policía se acerca. Sabe -porque se ha comentado previamente- que la cárcel hundirá ese espíritu libre e indomable. Finalmente, decide dejarlo escapar, a coger la gran ola o en el coche de 10 segundos que le debe. Con esto renuncia del todo a su compromiso con la ley (Utah llega a tirar la placa al agua). El héroe acaba su viaje.
Filosofía
A lo largo de toda la película, se va desgranando la filosofía de espíritus libres, descreídos del sistema que ponen sus propias normas. Se refugian en la adrenalina y en las emociones del momento. Bodhi llega a decir “no me importa morir si es haciendo lo que me gusta”. Toretto dice “durante esos 10 segundos soy libre, vivo la vida 400m cada vez”.
Conclusiones
No importa demasiado el contexto de un guión. Una atraerá al público surfista y la otra a los amantes del tuning. Te puede gustar más el olor a salitre o el asfalto caliente, pero las claves dramáticas son las mismas y son universales. Aceptación en el grupo, iniciación, camaradería, traición. Este caso es flagrante pero lo cierto es que Hollywood tiende a hacer la misma película una y otra vez con unas cuantas claves, cambiando la carcasa.
¿Y vosotros de qué sois más? ¿De pisar el aceleador o de cabalgar las olas? Contadnos en los comentarios. Eso sí, Kathryn Bigelow es mucho mejor que Rob Cohen.