7

Reseña de When the Light Breaks, de Rúnar Rúnarsson

Rúnar Rúnarsson ganó la Concha de Oro del Zinemaldia de San Sebastián en 2015 con Sparrows (Gorriones). Antes de eso, había estado en la Quincena de Cineastas con su primer largometraje de ficción Eldfjall en 2006, y ese mismo año había sido nominado al Oscar al mejor corto por The Last Farm. Este año ha presentado When The Light Breaks en Un Certain Regard, inaugurando la sección.

When The Light Breaks es una película pequeña en forma y duración, con apenas 82 minutos. La historia comienza con una pareja, Una (Elín Hall) y Diddi (Baldur Einarsson), haciendo planes. Ella se queja de tener que verse a escondidas, y él promete que al día siguiente romperá con su actual novia para resolver la situación. Hacen planes de viajes, e incluso Diddi se atreve a preguntar si tendrán hijos, a lo que Una responde entre risas que no corra, que hay tiempo para eso. El futuro les espera. O no. Porque enseguida vemos un accidente brutal que termina con la vida de Diddi. A partir de ahí, solo queda el pasado.

El pasado debería quedarse atrás cuando se ha superado el duelo, pero Una se encuentra sola con su dolor sin poder expresarlo libremente. Los amigos de toda la vida de Diddi, personas a las que ella no conoce, llegan a la ciudad. Ellos comparten un pasado público con el fallecido; ella, sobre todo, un secreto y un futuro roto. También está Klara (Katla Njálsdóttir), que comparte ese futuro roto con Una, aunque al principio no lo sepa. Solo uno de los amigos de Diddi, su compañero de piso, conoce la verdad y le aconseja a Una que no le diga nada a Klara por temor a empeorar su angustia. Hay una injusticia en esto que a Rúnarsson le interesa especialmente: por supuesto, a Una se le debería permitir llorar a la vista como lo hace Klara, pero en lugar de eso, tiene que gemir al margen, sabiendo muy bien que las lágrimas de Klara se derraman, al menos en parte, por ignorancia.

Una es una chica especial. Con un estilo muy personal, viste con ropa de hombre y se etiqueta como pansexual. Es muy distinta a Klara, pero ambas se reconocen en el dolor común, y Rúnarsson explora el proceso de duelo de las dos chicas, las relaciones que se forman en estas pequeñas comunidades aisladas y el peso de los secretos que no pueden ser revelados para no hacer daño al resto.

El trabajo de fotografía de Sophia Olsson es magnífico; la manera en que la luz juega con los personajes y ambienta las escenas no es solo bonita, sino que sirve para enfatizar la atmósfera de cada momento. No busca la postal, sino la realidad, sin por ello renunciar a la belleza. La combinación de la luz con la música alcanza momentos de gran intensidad, como ya pasara en Sparrows, sobre todo cuando suena una composición del difunto gran compositor islandés Jóhann Jóhannsson (Sicario, Arrival).

Con suavidad y sin sobresaltos, con escenas poderosas en su sencillez —especialmente una que fusiona los reflejos de las dos mujeres—, la película va creciendo, haciendo que Una y Klara comiencen a pasar más tiempo juntas. Las dos actrices realizan un trabajo magnífico, otorgando veracidad y profundidad a esta improbable y desigual relación que desemboca en un final tan bello como emotivo.

Qué bonito es ver cómo se puede hacer tanto con tan poco.

When the Light Breaks

Media Flipesci:
6.9
Título original:
Director:
Rúnar Rúnarsson
Actores:
Elín Hall, Katla Njálsdóttir, Mikael Kaaber, Ágúst Wigum, Gunnar Hrafn Kristjánsson, Baldur Einarsson