6.5

Halfdan Ullmann Tøndel debuta en el largometraje con La tutoría, una película que ganó la Caméra d’Or (mejor ópera prima proyectada en el Festival de Cannes, Quincena de cineastas o Semana de la crítica). Pero sin premio seguro que la película hubiera llamado la atención más allá de su propuesta solo por su linaje: Ullmann Tøndel es nieto del cineasta Ingmar Bergman y de la actriz Liv Ullmann.

El nietísimo

La historia parte de un incidente en un colegio noruego: el pequeño Armand, de seis años, ha sido acusado de agredir a un compañero. La dirección convoca a los padres de ambos niños, junto a la madre de Armand, la profesora y otros responsables del centro, para esclarecer los hechos. La reunión se transforma en una espiral de tensión donde los límites entre verdad y mentira, culpa e inocencia, se difuminan.

Sobre premisas similares se han construido otras muchas películas, sobre todo propuestas conversacionales, con debates sobre prejuicios y juicios precipitados. Sin embargo, La tutoría es distinta. Su apuesta no es por el realismo depurado y la confrontación verbal, sino por la sensación y la atmósfera. La película se mueve en un terreno onírico y desasosegante, lo que la aproxima tanto a la pesadilla como al absurdo.

Al principio, el espectador puede sentirse desorientado: los espacios del colegio se convierten en un laberinto opresivo donde los desplazamientos no tienen demasiado sentido ni continuidad, las conversaciones son constantemente interrumpidas y salpicadas por el absurdo, la cámara se pega a los personajes hasta lo asfixiante y uno no sabe cuál es la finalidad de la reunión. Pero pronto se comprende que esa confusión es deliberada. Ullmann Tøndel nos quiere perdidos, inseguros, desestabilizados; en la misma situacion que su protagonista. Así, la reunión que debería servir para esclarecer hechos se convierte en una travesía por el desconcierto, la pérdida de control y el abismo de lo irracional.

A esa atmósfera contribuyen las escenas de danza contemporánea que salpican la película, desconcertantes en un primer momento, pero que, en su rareza, refuerzan la sensación de que el suelo se tambalea bajo los pies de los personajes. Cuando la lógica se resquebraja se abre paso una coreografía de desquiciamiento. Resulta esclarecedora la ausencia de niños en toda la película, cuando su bienestar es la excusa que motiva todas las acciones de los adultos.

El motor emocional de la historia es Renate Reinsve, que interpreta a Elisabeth, la madre de Armand. Su actuación es simplemente espectacular. Ya consagrada por su papel en La peor persona del mundo, aquí lleva su registro mucho más lejos. Hay una secuencia que marcará su carrera: una escena de siete minutos en la que su personaje pasa de la risa al llanto, del desconcierto a la angustia. Es un tour de force interpretativo que, seguro, estará en los grandes momentos cinemtográficos de este año.

Aunque llena de aciertos, La tutoría no logra siempre que los riesgos que toma fructifiquen. En ocasiones, la película se dispersa. El director abre varias puertas hacia diferentes temas y subtramas, pero no siempre se atreve a atravesarlas del todo. Hay elementos que sugieren caminos que luego quedan desdibujados.

A punto de cerrar la película hay una secuencia bajo la lluvia con una potencia visual y emocional abrumadora que invita a un cierre abierto y cargado de ambigüedad, pero Ullmann Tøndel no se atreve a llegar tan lejos y se esfuerza por explicar un poco de más la situación, cuando a veces, en propuestas tan arriesgadas como las de este debut, es mejor no buscar respuestas y sumergirse en las dudas.

La tutoría

Media Flipesci:
6.7
Título original:
Armand
Director:
Halfdan Ullmann Tøndel
Actores:
Renate Reinsve, Ellen Dorrit Petersen, Øystein Røger, Endre Hellestveit, Loke Nikolaisen, Karen Chika Gjølmesli, Thea Lambrechts Vaulen
Fecha de estreno:
14/02/2025