Iñaki Ortiz GascónHace unos meses hablábamos con el colectivo Kristonkino porque estaban lanzando un crowdfunding para crear en Donostia el festival de cortos que ellos consideraban que faltaba. Un festival que permitiera ver en pantalla grande cierto cine invisible que quedaba algo descolgado del circuito. De hecho, tanta importancia le dan a la exhibición en condiciones que consideran que el aliciente del festival es ese, y no hay premio en metálico. Lo consiguieron. Por los pelos, eso sí, y después de peleárselo a lo grande con aquel cine de cartón gigante que se montaron los muy locos. Esta semana nos llega ya el festival y les saco un rato de sus agitados preparativos para que me aclaren un poco cómo será.
Elegía, un drama que esconde otro drama.
Hablo con Rubén Sainz, director de cortos y miembro del colectivo; que está acompañado por Laura Rodríguez Bauza, que se encarga de cuestiones de producción; y Asier Nazabal, responsable de esos carteles en los que el hombre invisible -como algunos cortos- entra en la ciudad. Lo primero es una buena noticia: ha entrado más dinero. Donostia Kultura ha apotado y también Kutxa. Esto les ha permitido tener cierto margen para hacerlo más como ellos querían. Desde el principio se había hablado de una pantalla gigante que sacarían a la calle, para llevar el cine a los barrios. Ahora, además, irá dentro de una gran carpa, algo que tenían en mente desde el principio pero para lo que hacía falta un aporte extra. Eso sí, la pantalla, para que pueda entrar en la carpa, ya no será tan grande como pensaban, pero tranquilos: son 5 metros de ancho que no está nada mal. Confían en que si este año sale bien puedan volver a tener apoyos para consolidar el festival.
La carpa
La sección oficial se proyectará dentro de una carpa que se montará en la plaza Blas de Otero (junto a la torre de Atocha). Será el jueves 6 y el viernes 7. También se podrán ver dos cortos internacionales fuera de concurso y un pase especial de El teléfono de los muertos, un corto de Jon Herrero -uno de sus colaboradores- del que me cuentan que tiene una posproducción muy llamativa a pesar de sus pocos medios. El tipo de trabajo que quieren visibilizar, me explican.
False Flag: Thriller al estilo americano
En la carpa habrá tiempo para charlar. Los Kristonkino son especialistas en crear espacios de encuentro, como ya demostraron con el Kartonkino y el Vermukino. Se trata de hablar de los cortos, de una manera menos informal que en los coloquios habituales. Y a ser posible, con los participantes que puedan estar -unos cuantos han confirmado asistencia, aunque tendrán que ir viendo exactamente cuándo están disponibles. El lubricante social vendrá de la colaboración con Taba, la cervecería de Tabakalera, que está junto a la plaza. Vamos, que no faltará la cervecita de rigor.
En la carpa caben 170 personas. La entrada es gratuita hasta completar aforo. Las entradas se recogen allí mismo y os recomiendo pasar pronto y empezar la tertulia previa que se vaya formando en la carpa. No os quedéis sin entrada, como pasó en el Vermukino.
Laborable: Dos desconocidos, una noche laborable.
La gala
La gala de entrega de premios será en los cines Príncipe, el sábado a las 21:00. También gratuita, con el mismo sistema de recogida de invitaciones. Antes de entrar habrá photocall, así que id guapos. Durante la gala podremos ver algunas actuaciones cómicas, con un par de gamberros que seguro que no defraudan. También se entregará un premio honorífico al actor Paco Sagarzazu. Se entregarán los premios del jurado y se pondrá el corto ganador. También habrá un premio del público, que habrá votado durante los dos días anteriores; y un premio que entregará (H)emen Her(e), la asociación de trabajadoras del ámbito audiovisual. Finalmente, se proyectará una sesión especial que será el estreno de un cortometraje.
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Para niños
Una de las secciones es Zinemakiddo, en la que se pondrán 25 cortos internacionales para el público infantil. No son todos de animación, me explican. Por otra parte, se ha querido que los chavales tomen parte activa y se ha hecho un taller en el que ellos mismos escribían, dirigían y protagonizaban cortos. “Llevaban hasta la pértiga” me explica Rubén. La idea es que después, en el festival, puedan ver su trabajo en pantalla grande, para acostumbrarlos a la importancia de las salas de cine, algo en lo que las nuevas generaciones parecen tener menos interés. La gente de El Sekadero (el microteatro de Tabakalera) ha participado ayudando a los niños en la interpretación. Se proyectarán el sábado a las 12:00, junto con el corto infantil favorito.
Save: este corto tiene niño, pero no es apto para la sesión infantil
La Masterclass
Habrá una masterclass sobre distribución de cortometrajes, el sábado a las 17:00 en Tabakalera, a cargo de Ismael Martín, director del departamento de distribución de la ECAM y responsable del programa “Madrid en corto”. Me cuentan que Martín es un experto que conoce bien los pequeños trucos para mover los trabajos de forma eficaz, así que, cortometrajistas, os interesa.
Precious Moments: para comentarlo en la tertulia
- Las entradas son gratuitas hasta agotar aforo.
- Los cortos se verán en la carpa de la plaza Blas de Otero.
- La gala es en los cines príncipe.
Jueves 6 (Plaza Blas de Otero)
17:00 – Zinemakiddo (infantil)
19:00 – Sesión 1
21:00 – Sesión 2
Viernes 7 (Plaza Blas de Otero)
12:00 – Zinemakiddo (infantil)
19:00 – Sesión 1
21:00 – Sesión 2
22:30 – El teléfono de los muertos
Sábado 8
12:00 – Príncipe – Entrega de premios de Zinemakiddo y proyección del taller.
17:00 – Tabakalera – Masterclass
21:00 – Principe – Gala de entrega de premios