Lo que esconde Silver Lake: buscando el sentido

Under the Silver Lake es una película enigmática, cargada de misterio no siempre racional. Es una mezcla entre cine negro clásico y referencias posmodernas de la cultura pop. Es una película que tiene deudas tanto con Hitchcock como con el referente del cómic underground, Daniel Clowes. Es una película que recuerda al humor patético de los Coen, entre ese Barton Fink despistado en Hollywood y el ocioso y desgarbado personaje del Nota. En cualquier caso, Los Ángeles. Ese es el centro de la atención del director, David Robert Mitchell, que ha explicado en varias entrevistas que quería rodar una película sobre su barrio. Un lugar en el que lleva “viendo cosas” durante años. Imaginar lo que ocurre en el interior de esas casas en pleno territorio de los famosos. Una película de ficción -con tintes fantásticos- que trata sobre una ciudad que sí es real, pero que al mismo tiempo es para Mitchell una ciudad de ficción.

Resumen del contenido

• Las pajas
• El estilo noir clásico y la pesadilla febril
• El significado de Lo que esconde Silver Lake
• Las similitudes con el cómic Como un guante de seda forjado en hierro

En este texto se desvelan algunas cuestiones importantes de la trama.
Recomiendo ver la película primero.

Pajas

El protagonista, como El Nota, es un tirado que se mueve inesperadamente entre bellas mujeres. Esto sucede de una manera tan sorprendente que se puede entender casi como las fantasías de una pajero en su casa: un voyeur que recibe visitas de una chica que cada vez va convenientemente vestida de una fantasía (tradicional alemana, enfermera). No es difícil imaginarse al personaje masturbándose mientras ve la tele, en lugar de, como vemos, tener sexo real mientras ve las noticias.

Las apariciones de Riki Lindhome, como fantasía sexual

Aunque quizá el guiño más esclarecedor a este respecto es cuando una de las mujeres con las que está, termina tomando la forma de una portada de Playboy que le ha servido a él durante la explosión hormonal de la adolescencia. Hemos visto la anterior chica en topless leyéndola mientras él lleva la camiseta puesta, él le explica que empezó a masturbarse con esa revista. Tiene un carácter simbólico para él. Podríamos entender mucho de lo que vemos como una paja, no solo a nivel de sexo, también hay mucha paja mental en la búsqueda del protagonista.

La portada y la muerte

Y ya de forma explícita, hay una escena en la que el protagonista se está masturbando mientras examina pistas. Sus objetos de deseo -como la portada de playboy- se mezclan en esa escena con las pistas que tiene ante sus ojos. Hasta tal punto que el siguiente paso lo encuentra al girar una página de contactos. Los servicios de una profesional son, a la vez, su próxima pista.

Una pesadilla noir

El director también ha explicado en varias ocasiones que escribió el guión muy rápidamente, como si fuera una pesadilla febril. La pesadilla está muy presente en todos los elementos surrealista. Los animales: la ardilla que cae del cielo, la mofeta que le marca de un modo asombrosamente imperecedero, los perros que no se sabe quién mata. También hay mujeres que ladran y otras que tienen cabeza de búho. Hay algo de Lynch en este Los Angeles bizarro. Pero en la ambientación -y en alguno de los posters del protagonista- también hay Hitchcock, con esa manera de él y otros en los 40 de señalar ostentosamente el rostro de los personajes con iluminación artificiosa. En realidad, esto ya lo había hecho Mitchell en su anterior película, It Follows.

La iluminación del rostro en It Follows y Lo que esconde Silver Lake

De todas formas, el tono de ambas películas es muy diferente. El propio director considera que It Follows tenía una dirección fría mientras que esta es mucho más emocional. Aquí hay una banda sonora mucho más dramática y menos escalofriante -aunque es del mismo compositor, Disasterpeace. Esa banda sonora se ajusta también al tono de noir clásico. La típica historia de detectives aunque aquí, Sam (¿Spade?) lo sea de forma aficionada. Hay femmes fatales, intriga, y pistas que llevan a otras pistas. Pero como en Puro Vicio -con la que comparte mucho- las pistas a veces no son más que ruido que nos llevan a callejones sin salida. Como en aquella, lo importante no es el argumento, es la estética de género. Un género inscrito en el ADN de la ciudad de Los Ángeles.

El significado de Under the Silver Lake

Como ya he dicho, es misteriosa, surrealista, extraña. Es muy probable que el espectador salga del cine algo confuso. Lo mejor es verla otra vez y sacar nuevas conclusiones. Entre otras cosas porque eso es lo único que vale, ya lo dice el director, que prefiere que cada uno haga su lectura. Y eso es lo que ofrezco yo, nada más que mi lectura. Os animo a que dejéis vuestro punto de vista en los comentarios y lo hablamos.

Under the Silver Lake es, sobre todo, una película sobre gente que busca cosas que no existen -esto así dicho por el propio Mitchell. Es una película muy paranoica, con leyendas urbanas y conspiraciones escondidas en una caja de cereales. Refleja un tiempo en el que mucha gente está dispuesta a creer y perseguir falsedades. Tiene importancia también el objeto de la búsqueda. Los personajes no abrazan la religión (aunque haya una secta), o algún tipo de activismo comprometido. Buscan el sentido de la vida en elementos de la cultura pop. Y volviendo a las palabras del director, dice que quería preguntarse si puede haber belleza y luz, en sentido filosófico, en objetos comerciales cuyo propósito no es más que generar riqueza. Y aquí entra de lleno la que seguramente es la mejor escena de la película y una de las primeras que estaba en la cabeza de Mitchell. El compositor de todos los hits de la historia.

El compositor dando donde duele

Ese viejo al piano es toda una metáfora de la Industria. Una visión cínica que quiere eliminar el romanticismo de los ídolos. Sam tiene un poster de Kurt Cobain sobre su cama, casi como un crucifijo de los que antes se tenían precisamente en ese lugar (no en vano, el ídolo del momento se llama Jesus). El autor omnipresente juega con Sam, haciendo sonar el gran hit de Nirvana, Smells Like Teen Spirit y le suelta este discursito:

La película está ambientada en 2011 -aunque no se dice, el director insiste en ello porque debe ser importante. Así que se puede suponer que personaje ha nacido a mediados de los 70, es decir, como el propio director. Es decir, de los últimos de la generación X. Es importante la cuestión de atinar el tiempo pues los elementos en los que el protagonista busca el sentido de la existencia son absolutamente generacionales. El himno de Nirvana es un ejemplo claro, pero también es importante la Nintendo a la que jugaba Sam y la revista de entonces (Nintendo Power). Una generación que ha perdido los referentes religiosos de sus padres, ya no sabe dónde buscar sus santos. Por supuesto, también, en los posters que tiene en las paredes. Por ejemplo, la chica que desaparecerá tiene un poster de (y está viendo en la tele) Cómo casarse con un millonario, lo que define completamente cuáles serán sus siguientes pasos.

Cómo casarse con un millionario

Como un guante de seda forjado en hierro

Mucha gente ha señalado ya el parecido de esta película con el cómic de Daniel Clowes Como un guante de seda forjado en hierro. Es normal que tanta gente coincida en esto porque tiene varias similitudes. La trama gira en torno a un hombre que busca a una mujer desaparecida y por el camino le van ocurriendo todo tipo de cosas surrealistas. La investigración tiene algo del cine noir clásico. Tiene un tono de humor patético que también encaja con la película. También hay leyendas urbanas fantásticas y algunas conspiraciones. La película tiene mucho del cómic aunque lo complementa con otras cosas distintas.

No es tanto una referencia estética, a nivel de encuadre (para empezar porque las viñetas son de orientación vertical). Si acaso hay un tono underground que se aprecia en el estilo. Pero es sobre todo a nivel conceptual, está más en el guión que en la imagen. De todas formas dejo aquí algunos ejemplos.

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