«dFeria es un pequeño lujo»

El día 6 de marzo comienza la vigesimotercera edición de dFeria, la feria de las artes escénicas de San Sebastián. Aprovechamos la ocasión para charlar con su director, Norka Chiapusso.

Para empezar, explícanos que es dFeria.

dFeria es una feria de teatro con dos pilares fundamentales. El primero, generar mercado con los espectáculos que participan en la feria y los programadores que vienen tanto de Euskadi como del resto del estado, de América y este año estamos abriendo la puerta hacia Europa. Por otro lado, al ser tan concentrado con 30 espectáculos en cuatro días, y todos se pueden ver, también es un Festival para la ciudad. Es un regalito para el aficionado, para el que le guste el teatro y para todo aquel que tenga curiosidad y quiera picar de vez en cuando. Hay propuestas y formatos diferentes. Hay teatro, hay danza, hay nuevo circo, hay propuestas que son… inclasificables.

El espectáculo inicial he visto que es algo muy circense

Es lo que se llama nuevo circo. Es una compañía francesa, de Burdeos, con la que hemos hecho una residencia, participamos en la producción con la Scène Nationale de Baiona y estrenamos el espectáculo en salas, porque este espectáculo se había estrenado en la calle, en Burdeos, y ahora hemos preparado la versión de sala.

Entonces, ¿dFeria es un evento que nace enfocado a la industria y luego se abre al público?

En su nacimiento primaba más la parte de mercado. Ahora también es muy importante. Piensa que vienen alrededor de 150 programadores,unos 50 distribuidores de teatro cada uno con sus clientes, cerca de 50 productores, periodistas… alrededor de la feria se mueven unos 450 profesionales. Intentamos que la programación sea muy seleccionada, muy novedosa, hay un 65% de estrenos, siete absolutos y otros Europeos o estatales, así que también es un festival muy interesante para el público. Nosotros también intentamos traer alguna cosita que, sin caer en lo más comercial, sea apetecible para el público. Siempre dentro de lo que podríamos llamar teatro de autor.

¿Hay más ferias de teatro como esta?

El fenómeno de las Ferias de teatro es un fenómeno prácticamente exclusivo del estado español. En Europa hay festivales. Algunos son exclusivamente para la ciudad, otros tienen mucho predicamento y prestigio, como Avignon, y también atraen a programadores que luego allí van a su aire. Pero en España, hace unos treinta años, nació la feria de Tárrega, luego vinieron Huesca, Donostia y Gijón. Poco a poco cada comunidad autónoma ha ido teniendo la suya, hasta que ahora tenemos unas 14 Ferias. Todas orientadas al mercado y con acuerdos con los sectores profesionales.

¿Cómo se sitúa dFeria dentro de esas Ferias?

Somos una Feria fuerte en el sentido de que está muy seleccionada, es internacional y tenemos unas infraestructuras muy buenas. Otras ciudades no tienen tantas posibilidades, nosotros tenemos esceanarios grandes, pqueños, medianos… y todos de calidad. También la ciudad en si tiene calidad. Igual si lo digo yo queda un poco raro, pero creo que esta feria es un pequeño lujo, creo que es de las punteras.

Norka dFeria

Además parece consolidada, con 23 ediciones ya.

Llevamos 23 ediciones, aunque con parones. La primera fue en 1988. Se celebraron cuatro ediciones y hubo problemas presupuestarios que provocaron un parón de unos 6 años y luego se retomó. Otro año tuvimos problemas con una huelga, más adelante hicimos un pacto con el sector que la apoyó en un momento crítico…. Hemos tenido de todo, pero creo que ahora estamos en la época en la que estamos más asentados.

Antes tengo la sensación de que dFeria era más incomprendida. Lo que programamos no son espectáculos comerciales y la hacemos entre semana pensando en los profesionales que vienen aquí a trabajar. Quizá no sea el mejor momento y horario para el público, pero por otro lado, el cine, el teatro, la lectura no son sólo un divertimento para el fin de semana. también es enriquecedor para el espíritu y lo hacemos como algo cotidiano. Si coges un libro no dices “sólo voy a leer los sábados”, así que, en ese sentido, entendemos que también es un regalo para el público, pero lo tienen que entender. Ha habido años que nos ha costado más vender entradas, pero ahora estamos en un buen momento. Sobre todo la franja a partir de la tarde, por la mañana vendemos poquitas. Igual llegará un día que pase como en el Festival de Cine, que hay gente que se coge vacaciones para ver películas por la mañana.

Al público donostiarra le falta curiosidad

¿Cómo reacciona la gente a las obras en otros idiomas que se representan con subtítulos?

Más que miedo a los subtítulos creo que quizá a la gente le falta un poco de curiosidad. Las cosas más conocidas funcionan bien, pero cuando no son conocidas les falta un poco de curiosidad. Quizá porque a veces se han llevado disgustos, pero es que a veces se pierden cosas buenísimas que pasan demasiado desapercibidas. El año pasado trajimos a los Gandini, que en nuevo circo tienen una personalidad de como trabajar el malabar, que son absolutamente maravillosos, y tuvimos muy poquita gente. Y era malabar, no era por los subtítulos, porque era gestual y malabar. También es verdad que a veces nos llevamos sorpresas positivas que no podemos explicar.

Yo creo que la feria te permite arriesgar. Es programación de calidad y a precios más asequibles. Hay entradas en el Victoria Eugenia por 10€, que te permiten picar sin pagar un precio de locura. Y el Victoria Eugenia este año va a ser muy potente.

¿Cómo se prepara una feria así?

Nos gustaría mejorar el tem de la preparación. Como son tantos estrenos y no admitimos obras que no se hayan estrenado después de la feria anterior, a veces los cerramos muy tarde y no podemos mandar la información a los programadores extranjeros con el tiempo que necesitan para programar sus viajes. En principio, hacemos una convocatoria en la que se nos presentan unas 300 propuestas. Eliminamos las que no cumplen los requisitos, hacemos una criba, luego vamos contemplando nuestros cupos de obras vascas, estatales, danza… Otras cosas, como el espectáculo de inauguración de este año, las tenemos apalabradas mucho tiempo antes.

Veo que ponéis mucho cuidado en la procedencia y el tipo de disciplina de las obras

Tenemos la programación muy medida. Empezamos siendo una Feria de Teatro, hacia 1996 o 97 la fuimos reconvirtiendo en una feria de Teatro y Danza. Ahora tenemos un 45% de teatro, otro 40 o 45% de danza y el resto de circo, intervenciones performáticas u otros formatos. También la tenemos muy equilibrada en cuanto a procedencia de las compañías. más o menos el 45-50% es del País Vasco porque uno de nuestros objetivos es apoyar a la creación vasca. Entre el 25 y 30% son del resto del Estado y el resto internacional. Todo está muy medido, eso fue lo que pactamos y eso es lo que hacemos.

El paso del tiempo

¿Cómo ha ido cambiado dFeria estos años?

La Feria nos la vamos reinventando cada año. Vamos analizando qué cosas funcionan, qué cosas no, a qué cosas no vamos a poder llegar, cuáles podemos mejorar… Por ejemplo este año vamos a contratar gente para facilitar la unión entre las compañías y los programadores, para facilitar la comunicación. Vamos a montar dos foros de negocio… siempre buscamos parámetros de mejora.

¿Y el teatro, cómo ha cambiado?

Lo que programamos en la Feria se mueve en una franja que no es netamente comercial, porque eso ya tiene su mercado. Si viene, por ejemplo, Luis Merlo con Carlos Hipólito eso ya va funcionar, porque tiene sus propios canales, su propio mercado. Nosotros buscamos cosas que tienen calidad, que tienen contenido, que cuentan cosas y no son banalidad o divertimento exclusivamente. Espectáculos que consideramos que son interesantes y que hay que apoyar para que sean conocidos. La feria no es un reflejo del teatro en el mundo, pero si que es un reflejo del teatro comprometido y contemporáneo con calidad.

cartel-dferia-2017

El tiempo y la evoución aparecen representado en el cartel de este año

Cada edición tiene un eje temático. En 2016 fue Conversaciones, en 2015 Entidad, en 2014 Fronteras y este año nos hemos propuesto que fuera el tiempo. Por eso, creo yo, la evolución plasmada en el cartel.

Hay una cosa que me llama la atención del teatro y es que, desde que tengo uso de razón, escucho “el teatro está en crisis”. Sin embargo sigue habiendo teatro.

El teatro siempre está en crisis y quizá siempre lo estará. Lo que tiene como detrimento también lo tiene como ventaja. Otras disciplinas evolucionan con la tecnología, expandirse por otros canales; pero el teatro es un arte en vivo que necesita a las personas tiene esas limitaciones; pero esa también es su fortaleza porque la tecnología nunca podrá sustituir a las personas y eso le permitirá sobrevivir otros mil años más. ¿Qué está en crisis? Pues si, y tiene su lógica, salvo que no haya una política de protección muy definida seguirá así. Es muy difícil la distribución, no es como una película que la ruedas y la proyectas donde quieras después. En el teatro hay que desplazar cada vez a mucho equipo, actores, técnicos… mucho costes añadidos. En los parámetros que nos movemos nunca va a ser un arte muy boyante; pero la fuerza es que es un arte en vivo, y que la gente siempre va a querer ver eso.

Y hablando de crisis, supongo que os afectaría como a todos. ¿Cómo estáis ahora?

Vamos remontando un poco. No estamos como en 2008, pero tampoco como en 2009. Vamos remontando poco a poco.

El legado del 2016 y las artes escénicas vascas

¿Os ayudó el 2016 y la capitalidad cultural?

El 2016 al que se le ha podido criticar tanto, en la parte escénica no fue donde peor se desarrolló. Además hicieron una cosa importante, porque cuando ocurren eventos de este tipo a nivel político se pueden mover cosas, y ellos intervinieron en producción, alguna muy bien y alguna muy mal. Creo que se ha avanzado en la mentalidad de que hay que ayudar a la creación desde lo público porque es algo que hay que proteger y dar las condiciones para que lo puedan hacer con mejores medios y más tranquilidad, sin que tengan que jugarse la vida en cada proyecto, es un legado colateral interesante.

Hay algunas compañías vascas, como Ados, Tanttaka, Kukai.. que están en boca de todos ¿hay vida más allá de estas compañías? ¿Cómo ves el panorama de las artes escénicas en el País Vasco?

La danza la veo con más salud que el teatro. Tengo la impresión de que a nivel teatral hubo unos años muy potentes, una generación de jóvenes entusiastas que se convirtieron en los profesionales que están trabajando ahora; pero creo que está faltando el relevo generacional. hay algún caso que si que está funcionando, pero son algo más puntual. Cuando estos que han sido la historia reciente del teatro vasco se empiecen a jubilar, que algunos ya rondan los 55-60 años, atrás no se ve un empuje con fuerza.

Tanttaka Teatroa presentará la obra 'Soka' en dFeria

Tanttaka Teatroa presentará la obra ‘Soka’ en dFeria

¿A qué se debe esto y cómo se puede solucionar?

Influyó la desaparición de Antzerti en su momento que provocó un vacío en la formación, ahora parece que en Bilbao se está moviendo algo, esperemos que se reactive. Porque la parte de la formación es fundamental, hay que hincarle el diente e irá dando sus frutos. Todas las generaciones que son un poco boyantes en Euskadi, e incluso que son empresarios en Madrid, salieron de Antzerti: Enrique Salaberria, Fernando Bernues, Elena Irureta, Ane Gabarain, Clara Badiola… También es verdad que estaba todo sin hacer, que el teatro estaba en ebullición en Cataluña y muchos de los que empezaron aquí habían estado en contacto con gente de allí, todo era nuevo y emocionante; pero en el momento en que se para eso se produce un vacío. Hay escuelas que hacen cositas, del TAE ha salido gente, pero tienen menos recursos, menos implantación, menos capacidad.

Norka como espectador

¿Qué te gusta a ti cómo espectador?

Si fuese una pregunta gastronómica te diría que a mi me gusta todo lo que sea bueno. Un chuletón, un pescado de la leche… Si es bueno gusta a todo el mundo. Un día puedes probar algo más profundo, otra algo más liviano y otra algo súper vanguardista. Si pienso en mi si que soy algo más heavy, pero cuando programo no pienso sólo en mi, porque a lo mejor me quedo solo.

¿Algo que te haya gustado ver últimamente?

Vengo ahora de Sevilla porque Salvador Tavora ha recuperado, después de 45 años Quejío, la obra que hizo que La cuadra pasase de ser una compañía de Sevilla a dar el salto al mundo. Yo no pude verla en su momento, porque tenía 9 años, y me apetecía muchísimo. Creo que es una obra que aunque sea dura sigue teniendo una vigencia absoluta y eso me gusta.

¿Eres capaz de ver una obra como un simple espectador, o siempre estás trabajando?

La primera vez que veo una obra siempre estoy trabajando. La segunda, si lo ha visto fuera y la segunda es aquí, me relajo más aunque tengo un puntito trabajando. Si la veo fuera, la segunda vez me relajo totalmente. Con Quejío no había ido con intención ir verlo para programarlo. Mi intención era verlo porque era un hito que lo hubiesen vuelto a montar, pero según la estaba viendo ya estaba pensando “si se da el contexto y la oportunidad por qué no traerla”.

Estela Medina interpretará "Solo una actriz de teatro"

Estela Medina interpretará «Solo una actriz de teatro»

Recomiéndanos algo para ver estos días

Por ejemplo Solo una actiz de teatro, lo interpreta Estela Medina considerada la mejor actriz latinoamericana, tiene 85 años y es la única alumna viva de Margarita Xirgu, e interpreta un monólogo sobre la propia Margarita Xirgu escrito por Gabriel Calderó que es un joven fenómeno del teatro Uruguayo y dirigido por Levón que otro grande del teatro Uruaguayo. Cuatro generaciones del teatro Uruguayo unidas en una obra.

The Primitals es divertida, fresca y joven. Una comedia a capella sobre una tribu de cromagnones disfuncionales que es como un rock&roll. Ultimo tren a Treblinka, una producción vasca que tiene tema, tiene propuesta y es muy interesante que se desarrolla en un escenario no convencional. En danza, una Medea flamenca con la hija de Salvador Tavora, Soka lo último de Tanttaka…

y así siguió desgranando más y más obras de dFeria. Y sonaban muy interesantes, así que os invito a todos a seguir su consejo y dejar que os pique la curiosidad. La ocasión lo merece.