Cineastas que marcarán los próximos años según El Contraplano

La lista de veinte cineastas que según Bong Joon-ho van a ser cruciales los próximos veinte años tiene un nivel altísimo y todos los directores y directoras que están en ella han demostrado un talento especial; pero no son los únicos. En El Contraplano hemos decidido completar esa lista y añadir unos cuantos nombres. En general poseen filmografías muy cortas, aunque lo más importante a la hora de seleccionarlos ha sido la sensación de que su carrera sigue una trayectoria ascendente, una evolución, que lo mejor está aún por llegar.

Estas son nuestras aportaciones:

Y estas sus películas valoradas por el Jurado Flipesci.


Celine Sciamma (Francia, 1978)

Después de licenciarse en literatura francesa, estudió guion en la prestigiosa escuela de cine La Femis y su trabajo de fin de carrera acabó convirtiéndose en el guion de su primer largometraje, Lirios de agua (2007), protagonizado por una joven Adèle Haenel y seleccionado por el el Festival de Cannes para la sección Un Certain Regard donde obtuvo muy buenas críticas. En esa película se podían apreciar los temas que marcarán la cinematografía de Sciamma en sus siguientes trabajos: el despertar de la sexualidad, el paso a la edad adulta y la homosexualidad. De hecho sus tres primeras películas –Tomboy, sobre una niña de 10 años que se siente un niño, y Girlhood sobre una chica adolescente intentando encontrar su lugar en el mundo- forman una especie de trilogía sobre la infancia y adolescencia femenina. Siempre con una mirada empática, sosegada y centrándose mucho en los sentimientos de las protagonistas. Poco a poco se empieza a notar una evolución en la dirección, cada vez más preocupada por el aspecto visual.

Tras guionizar Cuando tienes 17 años, de André Téchiné, protagonizada por dos muchachos adolescentes y con la homosexualidad como trasfondo, el siguiente gran éxito de Sciamma fue el guion de La vida de Calabacín (2016) de Claude Barras, una película de animación que fue un auténtico exitazo obteniendo premios y nominaciones desde que se presentó en La Quincena de realizadores de Cannes. En esta ocasión los protagonistas no eran chicas adolescentes, sino niños huérfanos y es que Sciamma hasta ahora no se ha alejado mucho de sus temas.

2019 fue el año de Retrato de una mujer en llamas, su reencuentro con Adèle Haenel y su película más trabajada visualmente, alcanzando unos niveles de plasticidad y pictorismo realmente notables. Además es su primera película protagonizada por personajes adultos aunque el descubrimiento de la sexualidad y la homosexualidad vuelven a estar presentes. También el cambio de etapa, si hasta ahora era de la adolescencia a la vida adulta en esta ocasión nos encontraremos con el paso de la soltería al matrimonio. Así, la película encaja perfectamente con los trabajos anteriores de Sciamma. El éxito de la película fue incontestable. Críticas excelentes (aunque no todas), numerosos premios y nominaciones como el mejor guión en el Festival de Cannes y los Premios del Cine Europeo, Mejor vestuario y otras diez nominacion en los Cesar, nominada a mejor película habla no inglesa en los Globos de Oro y los Bafta…

Celine Sciamma se ha convertido en una estrella del siempre potente cine francés y, además, en una representante del cine hecho por mujeres y abanderada de los movimientos LGTB. El futuro parece suyo.


Los hermanos Safdie (Estados Unidos, 1981 y 1984)

Joshua Safdie (1984) y Ben Safdie (1981) son dos hermanos de Nueva York que representan perfectamente la tesis que hemos mantenido sobre el nacimiento de un nuevo movimiento cinematográfico, un Nuevo Hollywood en la era digital. Aunque la primera película de Josh es de 2008, es ahora cuando han adquirido relevancia al trabajar con dos actores conocidos –Robert Pattinson y Adam Sandler– y llamar la atención de las majors. En una entrevista reciente a Indiewire afirmaron que esperaban que Hollywood empezara a retroceder al modelo anterior, cuando estaba más orientado a los nichos y los estudios intentaban conseguir cincuenta películas que generasen 20 millones en vez de dos películas que ganasen 1000. Eso es exactamente lo que nosotros creemos que está pasando.

¿Estamos viendo renacer un Nuevo Hollywood?

28/01/2020 - Ricardo Fernández

Estamos en un momento de cambio, quizá demasiado encima como para tener perspectiva de lo que estamos viviendo; pero estamos convencidos de que se avecinan cambios aún más potentes. Leer más

Josh y Ben llevan filmando desde que siendo niños su padre les regaló una Super 8, así que no es extraño que se fueran a estudiar cine a la universidad de Boston y que fundaran, en 2001, el colectivo Red Bucket Films con un grupo de amigos y conocidos. La idea era apoyarse unos a otros en sus diferentes proyectos (Coppola intentó algo parecido en los 70) y aunque no salió del todo bien sí que les sirvió para producir varios cortos y sus primeros largos. Por cierto, también produjeron Creative Nonfiction, el debut de Lena Duhan (Girls) en el que el propio Josh tenía un papel.

Su primer largometraje, The Pleasure of being Robbed (escrito por Ben y producido por Josh) es una película rodada con poquísimos medios en unos granulados 16mm sobre una joven cleptómana rodada. Cine independiente, o casi mejor, cine de guerrilla, con ecos a Cassavetes y el primer Jarmusch. Un trabajo que deja entrever muchos elementos que se repetirán en sus trabajos posteriores: el uso de la cámara en mano que a veces acerca la narrativa a la no ficción, escenas rodadas en calles sin cerrar y personajes que viven fuera de las normas en una continua huida. La actriz protagonista es Eleonore Hendricks, novia de Josh por aquel entonces y que ha seguido trabajando con ellos en labores de casting y producción. Por cierto, también trabajó en la primera película de Chloé Zhao, la directora de The Rider y una de las elegidas en la lista de Bong Joon-ho.

Poco a poco su cine de guerrilla, a veces asociado al mumblecore por su bajo presupuesto y su carácter neoyorquino pero demasiado sucio y barriobajero para encajar en el movimiento, comenzó a hacerse un nombre en el circuito de Festivales, primero fue The Pleasure of being robbed que fue seleccionada por la Quincena de Realizadores de Cannes. El siguiente año también seleccionaría Daddy Longlegs (con el título entonces de Go Get Some Rosemary) la primera película que dirigen conjuntamente y que está inspirada en sus propios recuerdos sobre la relación con su padre. Tras eso, en 2013, rodarían el documental Lenny Cooke, sobre un prometedor jugador de baloncesto que se pasó en Tribeca y en 2014 y Heaven Knows What, una película sobre la vida de la poetisa heroínomana Arielle Holmes protagonizada y guionizada por ella misma que estuvo en la sección Orizzonti del Festival de Venecia.

Seguían rodando con un presupuesto ínfimo, muy poco personal y actores no profesionales cuando reciben una llamada que les cambia la vida: Robert Pattinson había visto una imagen de Heavens Know What en la revista Indiewire y quería trabajar con ellos. Antes ya habían rechazado propuestas en su idea de seguir siendo independientes; pero esta vez aceptaron y el resultado fue Good Time, seleccionada por el Festival de Cannes en su Sección Oficial. La película recibió magníficas críticas, fue distribuida por A24, hizo que les llamaran de las majors y, sobre todo, que Martin Scorsese quisiera producir su siguiente proyecto. Curioso, porque muchos compararon Good Time con Taxi Driver. El siguiente proyecto es Diamantes en bruto, un guion que tenían escrito desde hacía muchos años pero para el que necesitaban más presupuesto y una estrella para protagonizarla. Del dinero se encargaron Scorsese y A24, mientras que la estrella elegida fue Adam Sandler que, en un papel totalmente alejado de lo que esperamos de él, ha realizado la que seguramente sea la mejor interpretación de su carrera. La película ha sido estrenada por Netflix con muy buenas críticas.

Cannes 2017: Los más nuevos, los más aplaudidos

25/05/2017 - Ricardo Fernández

Festival de Cannes 2017: Robert Pattinson, esa estrella, ese actor. Se aproxima el final del Festival sin una clara triunfadora entre las películas a concurso. Los hermanos Safdie, los menos conocidos del lustroso elenco de directores seleccionados, se han llevado una de las mayores ovaciones del certamen. Es probable que estemos ante uno de esos […] Leer más

Rodar con Robert Pattinson y Adam Sandler no ha cambiado el estilo de los Safdie. Ahora la fotografía está muy cuidada, pero sigue teniendo el mismo espíritu de guerrilla de antes, sigue apostando por personajes que viven al margen y solo saben huir hacia adelante, siguen rodando cámara en mano y siguen infiltrándose en calles sin cerrar rodando entre la gente que no sabe que está en una película, siguen convirtiendo la música en un personaje más de la película y siguen haciendo el cine que les da la gana. Frenético, sucio, auténtico. Su siguiente proyecto Josh lo ha definido como una mezcla entre Kill Bill y Déjame salir. ¿Podría sonar mejor?


Maren Ade (Alemania, 1976)

La importancia de esta cineasta va más allá de su obra como directora, ya que su productora Komplizen Films ha producido películas como Las mil y una noches, Redemption o Tabú, de Miguel Gomes, Una Mujer Fantástica de Sebastián Lelio, Western de Valeska Grisebach, Sinónimos de Nadav Lapid o La Gomera de Corneliu Porumboiu entre otras. Es decir, está detrás de algunos de los proyectos que más han dado que hablar en los últimos años dentro del cine de autor.

Pero vamos a centrarnos en su carrera como cineasta porque ella misma también ha dado mucho que hablar con sus películas. Comenzó estudiando producción en la Universidad de Cine y Televisión, aunque lo que más le gustaba era la ide ade dirigir no se atrevía aún a hacerlo. Tras rodar su primer corto como directora, Ebene 9 (2000), se cambió las clases de dirección.

The Forest for the Trees (Los árboles no dejan ver el bosque, 2003), una película que tan solo costó 160.000€ y rodó en menos de un mes, estuvo en los Festivales de Sundance (Premio Especial del Jurado) y Toronto. Con Entre nosotros (2009), su siguiente película, llega el reconocimiento internacional con el Gran Premio del Jurado y el de Mejor actriz (Birgit Minichmayr) en el Festival de Berlín. Una película muy observacional, que se cuece muy lentamente (demasiado lentamente en algunos momentos) sobre una pareja de vacaciones en Cerdeña y como pequeños eventos van rompiendo el equilibrio y mostrando grietas en esa relación. Aburrimiento, deseo, incorformismo… y un final impactante.

Pero la auténtica explosión de Maren Ade llegó en 2016 con Toni Erdmann. Presentada en una magnífica edición de Cannes donde ganó el Premio FIPRESCI, también ganó el FIPRESCI a mejor película del año, seis premios del cine alemán, mejor película, director, guión, actor y actriz en los Premios de Cine Europeos, fue nominada a mejor película extranjera en los Oscar… Toni Erdmann, como Entre nosotros, trata sobre la falta de felicidad plena cuando no parece haber motivos para ello. Mezclando drama y comedia, con algunos momentos inolvidable y, otra vez, un final soprendente (aunque en esta ocasión muchísimo más acertado que en Entre nosotros). Maren Ade hace una fina disección de nuestra sociedad y, de paso, se revela como una cineasta a seguir muy de cerca.


Benh Zeitlin (Estados Unidos, 1982)

Se podría pensar que una sola película es pronto para seguir a Benh Zeitlin. Quizá deberíamos esperar a su revisión muy personal de Peter Pan, Wendy, que se estrena este año. En realidad, a mí me bastaban con los 10 primeros minutos de su ópera prima: Bestias del sur salvaje. Porque era diferente, arrolladora, explosiva. Una locura de luces y música estruendosa que desde los primeros minutos se convertía en una experiencia sensorial.

Después del impacto, aquella película nos iba dejando un género a medio camino entre el cine social y la ciencia ficción. Y no como muchas otras películas de ciencia ficción que tienen contenido social, hablo más de una cuestión de estilo. La mezcla entre un cine de la América pobre y una temática extrañamente futurista. Una película de puro Sundance en lo formal pero que contaba una historia distinta. Un plato con mucho sabor como el soul food que cocinarían sus personajes.


Julia Ducournau (Francia, 1983)

Otra directora que cuenta con solo una película, pero qué película. Crudo fue una de las revelaciones del terror en su año. Una historia que cuenta el impacto que produce en una chica su acceso a la universidad. La película toca elementos de tabú sociales muy graves -el canibalismo- asociados a otros pequeños microtabúes sobre normas de conducta, principalmente de género aunque también hay pinceladas con la orientación sexual.

Crudo es un ejemplo muy claro de cómo una mujer detrás de la cámara aporta otro punto de vista. Muchos pequeños detalles de comportamiento, pequeños miedos. Sobre todo, el peso de lo normativo, la actitud oficial. El terror de Crudo es el terror que provoca una mujer dictando sus propias normas. Pero más allá de todas las consideraciones temáticas, Crudo es una película de terror con actitud salvaje, violenta, sangrienta. También es una película con una banda sonora que incluye hip hop feminista y otros grupos actuales. Desde lo más bizarro, Crudo habla de la juventud de hoy. La directora está preparando para este año un drama titulado Titane.

Crítica de Crudo.


Sean Baker (Estados Unidos, 1971)

Estudió cine en la Universidad de Nueva York y la Tisch School of the Arts con muy buenas calificaciones e hizo todo lo posible para permanecer en la industria aceptando todo tipo de trabajos, desde guionizar programas de televisión a editar vídeos de boda. Por fin logró debutar como director con Four Letter Words (2000), a las que siguieron Take Out (2004) y Prince of Broadway (2008). Películas que apenas pasaron de Festivales menores y locales.

Se empezó a hablar de Sean Baker de manera internacional con Tangerine (2015). Fue noticia incluso antes de que se viese la película porque para rodarla Sean Baker utilizó tres iPhone, algo a lo que se dio bastante bombo. Tangerine trata cuanta la vida de una prostituta transgénero que vuelve al barrio despues de un mes en la carcel. Fue estrenada en el Festival de Sundance con muy buenas críticas y tuvo después una gran carrera por Festivales. Sean Baker ya se había labrado un nombre en el mundillo. Aunque más colorista que los Safdie hay ciertos puntos en común como la cercanía de la cámara, el estilo realista, la sensación de movimiento y fuga constante o mostrar la cara más sucia y marginal de las grandes ciudades y, por extensión, de la sociedad.

The Florida project. Árboles rotos que siguen creciendo

28/09/2017 - Ricardo Fernández

Reseña de The Florida Project La nueva película de Sean Baker, director de la notable Tangerine, fue una de las grandes triunfadores de la Quincena de Realizadores este año. Una de esas películas que dio argumentos a quienes decían que la Quincena tenía mejores películas que el propio Festival de Cannes. The Florida Project gira […] Leer más

En 2017 estrenó en la Quincena de Realizadores de Cannes su mejor trabajo hasta la fecha, The Florida Project sobre la vida de una niña que vive con su irresponsable madre, que se gana la vida como puede, en un hotelucho de Florida. Una de las virtudes de la película es combinar el tono realista con el colorido y el mundo de fantasía infantil. Tierna y dura a la vez, esta película también es un perfecto retrato a la cara B de la sociedad del bienestar protagonizado por unos personajes atrapados en un círculo vicioso del que no se puede salir. Una película que podría ser la secuela (o la precuela, por aquello del círculo vicioso) de American Honey de Andrea ArnoldWillem Dafoe consiguió nominación a mejor actor en los Globos de Oro, los Oscar y los Flipesci y la película, además de numerosos premios y nominaciones, estuvo en los Top de lo mejor del año de muchísimos críticos y aficionados.


Lynne Ramsay (Escocia, 1969)

Aunque lleva mucho tiempo en esto -su primera película es de 1999- sólo ha rodado cuatro largometrajes y cada uno de ellos con más repercusión de lo anterior. Sí, todavía tenemos la sensación de que lo mejor está por venir.

Estudió fotografía en el Napier College, Edimburgo, luego ingresó en la Escuela Nacional de Cine y Televisión para estudiar cinematografía y dirección. Con su trabajo de graduación un corto titulado Small Deaths (1996) ganó el Premio del Jurado en Cannes, un premio que volvió a ganar dos años más tarde con Gasman (1998).

Dio el salto al largo con Ratcatcher (1999) una historia ambientada en Glasgow a principios de los 70 entre las clases obreras protagonizada por un niño de 12 años deshecho por haber causado accidentalmente la muerte de un amigo. Fue presentado en la sección Un Certain Regard de Cannes y, entre otros, ganó un premio BAFTA.

Su siguiente película Morvern Callar (2002) fue presentada en la Quincena de Realizadores de Cannes y recibida con bastante tibieza, aunque su protagonista Samantha Morton sí que fue muy elogiada. Tras eso, nueve años de parón hasta su siguiente película, un parón provocado, entre otras cosas porque Lynne había leído el manuscrito, aún sin terminar, de The Lovely Bones escrito por Alice Sebold y se dispuso a preparar la adaptación cinematográfica. El libro se convirtió en un best-seller, Spielberg puso sus ojos sobre él, compró los derechos y se los cedió a Peter Jackson porque su versión era más fiel al libro que la de Ramsay. La película de Peter Jackson pasó sin pena ni gloria por las pantallas.

Después de eso comenzó a adaptar la novela de Lionel Shriver, Tenemos que hablar de Kevin. Una producción que tuvo que sortear varios problemas presupuestarios y tardó mucho en poder rodarse con Tilda Swinton, Ezra Miller y John C. Reilly en los papeles protagonistas. Finalmente se estrenó en el Festival de Cannes de 2011 con unas críticas mayoritariamente muy positivas. Un relato brutal sobre una mujer feliz, realizada personal y profesionalmente que, tras muchas dudas, tiene un hijo y ve cómo su vida cambia al no saber gestionar su relación con él. Una película visualmente apabullante y con un desarrollo brutal, como un golpe en el estómago. Una película difícil de olvidar.

‘En realidad, nunca estuviste aquí»: una película que duele

01/12/2017 - Iñaki Ortiz Gascón

8 El héroe atormentado es un recurso goloso para dotar al personaje de una dimensión más humana y conseguir más fácilmente la identificación. Véanse los superhéroes post-Nolan. A veces, esto se lleva más allá y entonces pasamos a hablar de “antihéroe”. En el caso que nos ocupa, Lynne Ramsay ha ido aún más lejos y […] Leer más

Después de rodar algún corto, en 2017 volvió a Cannes para presentar En realidad, nunca estuviste aquí, esta vez con Joaquin Phoenix de protagonista. Una película que tiene ciertos puntos en común con la anterior: las dos están protagonizadas por dos de los mejores intérpretes de su generación, las dos son películas durísimas, están más centradas en las sensaciones que en la narrativa, tienen a la locura como telón de fondo, hacen un uso espectacular de la banda sonora, son visualmente muy poderosas y tienen una figura infantil (algo que también tenía su película de debut). De Cannes se fue con los premios a Mejor actor y Mejor guión y una enorme cosecha de buenas críticas.

Ella misma dice que está trabajando en otros proyectos, uno de ellos sería una película de terror. Algo que tiene mucho sentido en estos tiempos que corren.


Bertrand Mandico (The wild boys)

Mandico no es un director nuevo, lleva más de 20 años rodando cortos bastante experimentales pero no ha sido hasta hace poco cuando se ha lanzado con el largo. Se podría pensar que su puesta en largo le iba a lleva a un producto más convencional, pero nada de eso. The Wild Boys es una de las películas más extrañas de los últimos tiempos, que desde un universo hipersexual y fantástico reflexiona sobre la identidad sexual y se mueve en terrenos escabrosos. Donde otros directores entrarían de puntillas, Mandico se lanza de cabeza al agua.

Una mezcla constante de estilos, desde el color más pop hasta el blanco y negro. Entre La naranja mecánica y El señor de las moscas. Una puesta en escena que compone el plano en posproducción, con transparencias que distorsionan las escalas para provocar una emoción, fuera de cualquier realismo. Mandico se lo pasa pipa. Fue la película del año para Cahiers du Cinema. El director ya está trabajando en su nueva película, Paradis Sale. Una fantasía futurista que también promete ser estrambótica. Una manera de entender el estilo de Mandico es ver uno de sus videoclips para el genial grupo francés, M83.


Ruben Östlund (Suecia, 1974)

Antes de cine, Ruben Östlund estudió diseño gráfico y también rodó varios cortos y documentales sobre esquí que le sirvieron para ser admitido en la Escuela de Cine de Gotemburgo. A partir de ahí, película a película se ha convertido en uno de los máximos exponentes del siempre interesante cine nórdico y un referente del cine de autor a nivel mundial.

Debutó con Gitarrmongot (2005) ganando el premio FIPRESCI en el Festival de Moscú. Involuntario (2008) se estrenó en Un Certain Regard de Cannes en 2008 y luego hizo un recorrido por otros festivales recabando buenas críticas y premios, su carrera comenzaba a despegar. En su corto Incident by a Bank (2009), que ganó el Oso de Oro en Berlín, Östlund mostraba su gusto por el uso de la tecnología y las herramientas digitales generando los movimientos de cámara por ordenador en la postproducción. Con Play (2011) subió un paso más en su ascendente carrera ganando el Premio Coup de coeur en la Quincena de Cannes, la primera de las muchas distinciones que obtuvo la película, por ejemplo Mejor director en los Festivales de Tokio y Gijón.

El cine de Östlund comienza a adquirir unas características muy claras: un enfoque realista roto por situaciones absurdas, a veces surrealistas y teñidas de humor, en largas tomas que hacen que muchas veces sea más importante el tiempo entre los hitos narrativos que la propia trama. De hecho, sus primeras películas son muy episódicas, una sucesión de situaciones como mucho levemente hilvanadas entre sí. El cine de Östlund poco a poco va adquiriendo un caracter más narrativo, pero nunca abandona ese espíritu capitular se sucesión de escenas que sirven para diseccionar a la sociedad actual e invitan al espectador a plantearse qué haría en una situación similar. Asegura que uno de sus referentes es el también sueco Roy Andersson.

Todos estos elementos encajan a la perfección en Fuerza Mayor (2014) su primer gran éxito internacional. Premio del jurado Un Certain Regard en el Festival de Cannes, Giraldillo de oro a la mejor película y premio a mejor guión en el Festival de Sevilla, seis Premios Guldbagge (Suecia), nominada a mejor película en habla no inglesa en los Globos de Oro y los Bafta. Aunque sus referentes siguen ahí, Östlund ya tiene una voz propia y alcanza unas cotas altísimas en su mezcla de humor, drama y disección del comportamiento social.

Fuerza Mayor no fue nominada a los Oscar, pero The Square (2017) sí, y además lo ganó. Como también ganó la Palma de Oro del Festival de Cannes, dos Flipesci anuales (mejor guion y dirección), seis Premios del Cine Europeo… es decir, un auténtico pelotazo. Todas las características del cine de Östlund en su máximo esplendor en una película que, partiendo del mundo del arte, vuelve a sacar los colores de nuestra sociedad.

The Square, cine con mucho arte

21/09/2017 - Ricardo Fernández

Reseña de The Square La ganadora de la Palma de Oro en la ultima edición del Festival de Cannes, The Square de Ruben Östlund, es la encargada de inaugurar la sección Zabaltegi-Tabakalera del Festival de San Sebastián. Una sección cada vez más potente que reúne a gran parte de las películas más interesantes y especiales […] Leer más

Ahora se encuentra trabajando en Triangle of sadness, una película con Woody Harrelson en la que un grupo de personas formado millonarios, modelos y una señora de la limpieza naufraga en una isla desierta. Con ese punto de partida y Östlund en la dirección la película promete ser uno de los títulos de referencia de 2021.


Peter Strickland (Reino Unido, 1973)

A Peter Strickland ya le hemos dedicado un monográfico y una entrevista. Os dejamos con los dos artículos.

¿Quién es Peter Strickland?

17/08/2018 - Iñaki Ortiz Gascón

In Fabric, la última película de Peter Strickland, ha sido seleccionada en la sección oficial del Zinemaldia y es un gran tanto para el festival. Puede que aún no sea un nombre ampliamente conocido pero ya ha sido definido por The Guardian como uno de los cineastas británicos claves de su generación. Todas sus películas […] Leer más

Peter Strickland: quería ambientar la película antes de Internet

26/09/2018 - Iñaki Ortiz Gascón

Estética: «quería dar la imagen de una medusa cuando está flotando en el aire«. Sobre el tiempo: «Está ambientada en 1993«. Sobre Netflix: «Yo pensaba que el futuro era tener más opciones, no menos«. In Fabric era una de nuestras películas más esperadas de la sección oficial del Festival de San Sebastián, por ser de […] Leer más


Greta Gerwig (Estados Unidos, 1983)

Antes de convertirse en una de las directoras más exitosas de la actualidad, Greta Gerwig era conocida la Reina de Mumblecore, un género de películas independientes de muy bajo presupuesto que surgió a principios de este siglo. Greta Gerwig actuó y coescribió varias de ellas, convirtiçendose en el rostro más reconocible y una de las causantes del auge del género. De ahí pasó a actuar en películas con mayor presupuesto como Greenberg, Frances Ha y Mistress America de Noah Baumbach, A Roma con amor de Woody Allen, Lola Versus de Daryl Wein, Maggie’s Plan de Rebecca Miller o Jackie de Pablo Larraín entre otras.

Su carrera como actriz estaba consolidada pero esta antigua estudiante de inglés y fillosofía del Barnard College con antigua vocación de dramaturga no se conformaba con eso y comenzó a trabajar en Lady Bird (2017), su primer largometraje como directora. En el reparto Saoirse Ronan, Lucas Hedges y Timothée Chalamalet. Si esta lista fuera de intérpretes en lugar de directores y directoras, estos tres nombres estarían seguro. Tras su estreno en el Festival de cine de Telluride, Lady Bird recaudó casi ocho veces su presupuesto, recibió unas críticas mayoritariamente muy positivas y en la temporada de premios fue protagonista con 2 Globos de Oro (mejor película y mejor actriz, en la categorúa de comedia o musical) además de otras dos nominaciones y otras cinco nominaciones para los Oscar (película, dirección, guion, actriz y actriz de reparto). De esta manera Greta Gerwig se convirtió en la quinta mujer, tan solo, en ser nominada a mejor dirección. En Lady Bird a Gerwig se le nota la influencia del cine independiente americano del estilo de Noah Baumbach y Richard Linklater, pero también un punto de vista muy personal quizá porque la película parece tener mucho de autobiográfico.

Lady Bird, entre la rebeldía y la estupidez

04/03/2018 - Ricardo Fernández

Lady Bird es el debut en la dirección de Greta Gerwig. Una película bastante autobiográfica sobre una adolescente en un instituto de Sacramento, California. Leer más

Su siguiente película, y última hasta la fecha, ha sido Mujercitas (2019) de nuevo con Saoirse Ronan y Timothée Chalamet; pero además con Florence Pugh (otro nombre a tener en cuenta), Emma Watson, Laura Dern, Meryl Streep y Louis Garrel formando un elenco espectacular. No era un reto fácil volver a adaptar la novela de Louisa May Alcott; pero la película no solo tuvo muy buenas críticas -que destacaron la visión feminista de la adaptación-, también fue un éxito en taquilla y recibió seis nominaciones a los Oscar, de las que solo ganó mejor vestuario. Aunque fue nominada a Mejor película y Mejor guión adaptado (escrito por la propia Gerwig) no fue nominada a Mejor dirección, lo que generó una gran polémica.

Su siguiente película anunciada es Barbie, con Noah Baumbach -su marido desde hace unos años- colaborando en el guion y Margot Robbie como protagonista. Con ese personaje y teniendo en cuenta el discurso feminista que siempre ha mantenido la cineasta, el resultado puede ser realmente muy interesante.


S. Craig Zahler (Estados Unidos, 1973)

S. Craig Zahler consigue su primera cámara a los 15 años. Para entonces ya ha devorado el cine de Sam Raimi, George Romero, Tobe Hooper o Sam Peckinpah. También ha tenido una época de obsesión con la cultura japonesa, el anime y el cine de Akira Kurosawa. Como el cine no lo es todo ha leído todo tipo de literatura pulp y a autores como H.P. Lovecraft, Robert E. Howard, Edgar Rice Burroughs y Jim Thompson. El siguiente paso de su carrera es la escuela de cine de Nueva York. Mientras estudia se va labrando cierto nombre como escritor de novelas pulp de ciencia ficción, novela negra y western (en español solo está publicada una, Espectros de una tierra rizada). También toca la batería y escribe las letras en un grupo de Heavy Metal llamado Realmbuilder.

Además de las novelas escribe numerosos guiones (él mismo asegura que tiene más de veinte terminados ahora mismo); pero no logra que ninguno se convierta en película hasta que en 2011 el director francés Alexandre Courtès rueda con guion de Zahler la película de terror The Incident (Asylum Blackout).

 

En aquellos años su nombre suena asociado a varios proyectos como un guion para Park Chan-wook, la adaptación de una novela suya protagonizada por Leonardo DiCaprio y Jamie Foxx o una versión de Robotech con Tobey Maguire; pero ninguno de ellos se materializa hasta que en 2015 se estrena Bone Tomahawk, su primer largometraje, escrito y dirigido por él y con Kurt Russell, Patrick Wilson, Matthew Fox y Richard Jenkins en el reparto. Zahler gana el premio a mejor director en Sitges y logra dos nominaciones a los Independent Spirit con este western que poco a poco, a cocción lenta, termina trasformándose en un brutal relato de terror. En esta película ya están todos los ingredientes del cine de Zahler: mezcla de géneros, tomarse su tiempo para fijarse en los detalles, para sumergir al espectador en el entorno de los personajes y una explosión final de violencia sin cortapisas. Sus protagonistas están dispuestos a hacer lo que sea por conseguir sus objetivos y ayudar a los suyos.

Venecia 2017: Vince Vaughn deja KO a Virzì y Guédiguian

04/09/2017 - Carlos Elorza

El italiano Pablo Virzì, ganador de la Espiga de Oro de Valladolid con su anterior película, Locas de alegría y del Gran Premio del Jurado de Venecia hace 20 años con Ovosodo, ha presentado a concurso su primera película estadounidense The Leisure Seeker, típico producto-fórmula para ganar premios del público. El francés Robert Guédiguian ha […] Leer más

Su siguiente película, Brawl in Cell Block 99 pudo verse fuera de concurso en el Festival de Venecia de 2017. De nuevo con un reparto potente: Vince Vaughn, Jennifer Carpenter, Don Johnson y Udo Kier. Un drama carcelario con toques pulp y explotation, tan físico como brutal; pero a la vez emocionante gracias a la magnífica interpretación de Vaughn. En 2018 vuelve al Festival de Venecia, fuera de concurso otra vez, con su último trabajo hasta la fecha Dragged Across Concrete. En esta ocasión es un buddy film policíaco protagonizado por Mel Gibson Vince Vaughn que, como en el resto de sus películas, tras cocerse a fuego lento se transforma en un brutal y violento viaje al infierno. Aunque tiene muchas críticas positivas también empiezan a surgir las negativas que atacan, más que al cine, a la ideología. Acusan al director de racista, despreciar la vida humana, excesivamente violento… Hubo un director en los 90 que también remezclaba géneros, adoraba la cultura pulp, le encanta(ba) jugar con el ritmo de sus películas y detener la acción justo antes de la explosión que recibió las mismas acusaciones y críticas. Sí, estoy hablando de Quentin Tarantino. Pues eso.


Dónde ver el pasado de los directores de futuro

21/03/2020 - El Contraplano

Filmografía online de los directores de la lista de El Contraplano Nos hemos atrevido a completar la lista que hizo Bong Joon-ho con directores y directoras que serán relevantes en los próximos veinte años. Aprovechando estos días de cuarentena y reclusión casera por el coronavirus, os indicamos donde se pueden ver las películas que están […] Leer más

¿Y los vuestros? ¿Cuáles son vuestros nombres para la lista? Podéis dejarnos en los comentarios vuestras aportaciones.